Las entrevistas en profundidad forman parte de las herramientas de investigación cualitativa de mercados. Este es un método de investigación que se apoya en la interpretación de ideologías, costumbres, valores y la realidad social para recoger información significativa.
Qué son las entrevistas en profundidad
Podemos definir las entrevistas en profundidad como un método de recopilación de datos cualitativos acerca de la percepción de los sujetos entrevistados. Durante ellas, los participantes e investigadores exploran diferentes puntos y pueden cambiar el rumbo del proceso cuando sea necesario.
Esto es posible porque, en ocasiones, se realizan preguntas abiertas, lo que resulta de gran ayuda en la investigación de mercados.
El objetivo de este tipo de entrevistas es descubrir la perspectiva, las emociones y las experiencias de los entrevistados. Además, nos permite centrarnos en los detalles de la investigación más importantes. De hecho, gracias a ellas, se evalúan diferentes opciones para gestionar el proceso de investigación mientras se colabora en el análisis de datos.
Las características esenciales de este tipo de entrevistas son:
- Su estructura es flexible y los temas están organizados para cubrir diferentes áreas.
- Es un método muy interactivo donde se estimula al entrevistado para que conteste.
- En ellas se utilizan varias técnicas de sondeo. En consecuencia, la comprensión de los resultados se efectúa mediante la explicación y la exploración.
- Durante la entrevista se obtienen diferentes descubrimientos, hallando ideas y soluciones a los problemas planteados.
Ventajas de las entrevistas en profundidad
Las entrevistas en profundidad tienen diferentes ventajas. Entre los beneficios que se obtienen con este método de investigación de mercados, destacamos que los participantes no tienen sesgos. El motivo es que se escogen de forma minuciosa.
Del mismo modo, tanto el entrevistador como el entrevistado tienen una relación cómoda. Así, las respuestas que se generan son más profundas en los temas más sensibles. Por otro lado, los investigadores formulan cuestiones de seguimiento para obtener información adicional antes de regresar al cuestionario principal. Con esta estrategia se consigue mejorar la comprensión de la actitud de los participantes.
Además, cuando hacen las preguntas, los investigadores pueden analizar tanto los cambios de tono como la elección de las palabras de los entrevistados. También hay que tener presente que la cantidad de muestras recogidas no es muy amplia, pero la información que se recoge es de gran utilidad. Además, la comparativa de datos es muy sencilla.
Por último, hay que destacar que los entrevistadores tienen una gran experiencia. Todo esto hace que este tipo de reuniones sean muy beneficiosas para las empresas. Especialmente, porque obtendrán un informe muy detallado sobre la opinión y el comportamiento de una persona.
Pasos para realizar entrevistas en profundidad
Estos son los pasos que se deben llevar a cabo:
1. Recopilar información sobre el entrevistado y su contexto
Cuando sea posible, es conveniente obtener información sobre el entrevistado. Así, será más sencillo orientar la entrevista hacia los aspectos que más nos interesen.
2. Diseñar un guion temático en el que incluir las preguntas principales y secundarias
En el guion no podemos obviar aquellos temas que más nos interesan. Posteriormente, podremos hacer las preguntas adaptadas a las características del entrevistado.
3. Programar la entrevista cuando el investigado prefiera
Necesitamos que la persona a la que entrevistamos esté cómoda, por eso, es mejor agendarla a una hora que le vaya bien.
4. Motivar al informante y darle confianza para que responda
No hay que interrumpirle en su discurso; es importante darle confianza para que se abra y hacer preguntas descriptivas. Aquí el objetivo es que se exprese con libertad; eso sí, los temas que sean relevantes para nosotros se pueden introducir de diferentes formas y hay que escoger la adecuada.
5. Grabar la entrevista
Esta entrevista es un acto único donde no se puede dejar lugar a las improvisaciones. Para ello, la grabadora debe estar preparada antes de comenzar. Asimismo, hay que contar con el consentimiento del entrevistado.
6. Realizar anotaciones tras observar la expresión corporal y los gestos del entrevistado
Merece la pena anotar los silencios, las emociones, los estados de ánimo y las posturas cuando son significativas. Además, conviene incluirlo en la transcripción.
7. Determinar la duración máxima de la entrevista
La duración de la sesión no debe ser superior a dos horas y conviene interrumpirla si se aprecian signos de cansancio. En esta situación, habría que fijar una nueva fecha para continuar.
8. Transcribir lo antes posible las grabaciones y verificarlas con el informante
Cuanto antes se transcriba la entrevista, mejor se recordarán las expresiones y los pasajes que la grabación no haya captado por ruidos u otras circunstancias. Asimismo, si se dispone de la oportunidad, se puede contrastar el contenido de la transcripción con el informante y que este lleve a cabo las modificaciones que considere.
Además de seguir estos pasos, en las entrevistas en profundidad hay que respetar siempre al investigado. Sobre todo, si decide interrumpir la sesión o si apreciamos que está sufriendo. En este caso, desde Strategik recomendamos agradecer su esfuerzo para que se quede con la sensación de habernos sido de utilidad.