La fusión de empresas es una de las soluciones por las que optar en tiempos de crisis para sobrevivir o bien para concentrar mercado en periodos de bonanza económica. Gracias a esta operación, se pueden combinar dos o más compañías en una nueva figura jurídica de diferentes maneras. ¿Cómo se realiza y qué ventajas tiene? Lo analizamos a continuación.
En qué consiste una fusión de empresas
Tal y como vimos en los tipos de fusiones y/o adquisiciones de empresas y, aunque sea algo habitual en el mundo de las finanzas corporativas, las fusiones de empresas pueden ser complejas en la práctica. Todo depende de las que estén involucradas en el proceso, sus tamaños y orígenes. Entonces, ¿en qué consiste una fusión de empresas?
Este proceso es una completa transformación de todas las partes implicadas. Por regla general, se produce entre dos organizaciones o sociedades independientes que deciden unir tantos sus pasivos como sus activos. Como resultado, aparece una nueva entidad en la que se desarrollará una actividad de forma conjunta y bajo un mismo nombre, estructura y objetivo.
Las nuevas participaciones o acciones se distribuyen entre los socios de manera proporcional a su participación en el capital social de las empresas anteriores.
Tipos de fusiones de empresas
Son muchas las razones que motivan este tipo de operaciones. Entre ellas, destacan:
- Riesgo económico de pérdida del negocio.
- Pretender reducir la competencia o fortalecerse.
- Diversificar la gama de productos.
- Acceder a tecnologías costosas.
Los procesos como este llevan tiempo, recursos y se realizan en varias fases en función de los objetivos y organizaciones involucradas. Además, por supuesto, hay que tener presentes los tipos de fusiones de empresas que se quieren implementar. Hay 5 principales.
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Absorción
Una empresa se hace con el patrimonio de otra u otras. En este caso, se absorben recursos, deudas y, también, patrimonio. Los socios de la empresa absorbida recibirán acciones de la empresa absorbente.
Cabe la posibilidad de que ambas empresas puedan seguir existiendo, pero de forma independiente.
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Pura
Aquí desaparecen por completo las empresas originales y se crea una nueva. Los pasivos y los activos anteriores se convierten en acciones para los nuevos socios. Por regla general, se trata de conservar el talento humano. En cambio, en otras ocasiones, se hace un recorte de todos los empleados tratando de conseguir equilibrio y mayor competitividad.
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Aportación parcial del activo
Esta situación se caracteriza porque una empresa da a otra sus activos. Quien los absorbe no necesita cambiar su razón social, pero la primera desaparece.
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Vertical
Este tipo de fusión empresarial se produce entre organizaciones que trabajan en diferentes nichos de producción. Se da cuando dos o más empresas fusionan sus patrimonios para incrementar la productividad y la eficiencia.
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Horizontal
Es lo contrario a una fusión vertical, pues se trata de dos o más empresas que trabajan en el mismo sector. Ambas deciden unir sus esfuerzos para conseguir un mayor impulso, desarrollar nuevas soluciones y reducir su competencia.
Ventajas de la fusión de empresas
Las fusiones son procesos difíciles que requieren tiempo y esfuerzo para ejecutarse bien. No obstante, aportan ciertos beneficios para los participantes. ¿Cuáles son las ventajas de la fusión de empresas?
Diversificación de mercado
Aunque un negocio sea muy versátil, terminará enfocándose en un nicho concreto y segmentado para poder satisfacer correctamente a su público objetivo. Esto limita la forma en que la empresa se posiciona en el mercado y reduce sus posibilidades.
Sin embargo, tras la fusión, se expande el horizonte de ambos negocios y aparece la posibilidad de diversificar.
Alcance de la marca
El aumento de alcance de la nueva marca se produce porque se unen dos públicos objetivos, pues es improbable que ambas compartan el mismo target. Esto implica una ganancia interesante y orgánica en la repercusión de la marca.
Como consecuencia, se estará favoreciendo el crecimiento del negocio y las oportunidades de venta.
Incremento de ingresos
A mayor capacidad de mercado y exposición al público objetivo, mayores serán las oportunidades de negocio. Las fusiones, generalmente, mejoran la tasa de conversión.
El aumento de ventas y de ingresos permite a la organización disponer de más recursos para su desarrollo.
Reducción de costes y riesgos para una mejor actuación
Los objetivos comunes y las sinergias son las motivaciones principales de casi cualquier fusión empresarial. Para llevarla a cabo, es necesario realizar una reestructuración completa de la que surgirá la nueva empresa. Durante esta etapa, se pretende optimizar procesos, eliminar aquello que no es rentable y corregir los cuellos de botella.
El resultado de estas acciones es una nueva estructura más limpia, eficiente y cuyos costes se han reducido al mínimo. Asimismo, se trata de incrementar el margen de beneficio, lo que favorecerá nuevas inversiones y una mayor ventaja competitiva.
Gracias a la unión de esfuerzos, la nueva empresa será más fuerte que las dos anteriores y podrá tomar decisiones más estratégicas. Además, sus perspectivas de mercado serán mejores, lo que facilitará la obtención de financiación y su crecimiento.
Con la fusión de empresas, se pretende unir esfuerzos para mejorar los resultados integrando los procesos y recursos de varias organizaciones.
