El proceso contable es uno de esos puntos claves en la contabilidad de las empresas y, por tanto, para su crecimiento. Hoy nos adentramos en su importancia y en las diferentes etapas del proceso contable que registran las actividades y su impacto en la productividad.
Qué es el proceso contable
Denominamos así al registro de las operaciones financieras de una organización durante un período concreto, generalmente un año. Por eso, otra forma de calificarlo es ciclo contable. Durante este tiempo se registra la actividad de la empresa de manera cronológica con datos fiables de todas las transacciones que se realizan.
Los datos se reflejan en los libros de contabilidad, en concreto, en el libro diario. De este modo, resulta más sencillo conocer la evolución del negocio y realizar un balance de comprobación. En consecuencia, se mejora la toma de decisiones para optimizar los procesos de negocio.
Errores en los procesos contables de una compañía
Para que una empresa pueda crecer, es fundamental que tenga un estricto control de su contabilidad. En caso de que se cometan algunos errores, las consecuencias son:
- Desconocimiento del estado financiero del negocio.
- Multas, sanciones o investigaciones por parte de la autoridad competente.
- Evitar disfrutar de ciertos beneficios fiscales.
- Las cuentas no estarían ordenadas y no se tendría un control sobre estas.
- Volver a organizar todo y corregir los errores supone una considerable pérdida de recursos y tiempo.
Etapas del ciclo o proceso contable
El ciclo o proceso contable se estructura en diferentes etapas en las que se llevan a cabo acciones para garantizar el registro de la actividad de la empresa. De este modo, se pueden preparar los estados financieros y conocer el balance. Veamos ahora las diferentes etapas.
1. Identificar las operaciones
En Strategik ponemos a disposición de nuestros clientes a los mejores auditores financieros para cada caso. Y lo primero que hacen nuestros especialistas es investigar todas las operaciones contables de la compañía. Estas pueden ser:
- Rutinarias. Son constantes en las actividades de la empresa y se dividen en básicas y de apoyo. Las primeras sirven para obtener bienes o servicios y se enfocan en usuarios o clientes externos. Las segundas, por su parte, se centran en los usuarios o clientes internos y externos y sirven para prestar soporte a las operaciones básicas.
- No rutinarias. No son permanentes, sino extraordinarias. Algunos ejemplos son:
- Daños o pérdidas.
- Adquisiciones o remodelaciones.
- Procesos de I+D para desarrollar un nuevo producto o servicio.
2. Recopilar información
La información se recoge a través de los medios definidos para cada una de las operaciones. Se hará de manera distinta dependiendo tanto del objetivo como de la empresa. Así, el analista económico ha de asegurarse de que toda la información es confiable y real.
3. Desarrollo de los asientos contables
En los asientos contables están las anotaciones (movimientos de la empresa) reflejadas en los libros de contabilidad. Con ellos se llevan a cabo la clasificación y el registro de toda la información mediante el esquema basado en el principio de partida doble. Este principio establece que toda operación económica tiene un doble tratamiento contable, representado por los conceptos de «debe» y «haber».
Los cargos o el deber se colocan a la izquierda de la tabla, y a la derecha, el haber. Además, para realizar los asientos contables se combinan el debe y el haber con las cuentas contables:
- Reales o balances. En ellas se registran las operaciones que afectan a la situación financiera de una compañía. Hablamos de su patrimonio, pasivos y activos.
- Resultados de ganancias y pérdidas o nominales. Registran las operaciones que tienen un impacto en los resultados financieros de una organización. En esta ocasión, hablamos de los ingresos, costes y gastos.
4. Resúmenes intermedios
Los estados financieros que informan a los usuarios internos y externos sobre los recursos de la empresa se generan a partir de los resúmenes intermedios. Estos resultados se registran en dos tipos de libros contables: los principales (libro diario, libro mayor, columnario y balances) y los auxiliares.
5. Estados financieros
Los estados financieros son el resultado final del proceso contable y su objetivo es presentar la información financiera a los gerentes de la empresa. Así se facilita la toma de decisiones económicas informadas.
La información que proporcionan está enfocada en aspectos como capacidad de crecimiento, posición financiera, rentabilidad y flujo de fondos. Estos estados comprenden cuatro partes:
- Balance general. Ofrece una radiografía clara del estado de la empresa en un tiempo determinado.
- Estado de resultados. Es el estado de las pérdidas y las ganancias. En él se registran tanto los ingresos como los gastos de una compañía.
- Estado de cambios en el patrimonio neto. Refleja las razones de la variación en el patrimonio de la empresa.
- Estado de flujos de efectivo. Describe las actividades de operación, inversión y financiamiento de la empresa. A través de él se evalúa su impacto en la actividad de la empresa.
En Strategik sabemos cómo realizar el proceso contable de un negocio para facilitar, mejorar y optimizar su toma de decisiones. Cualquier empresa puede contactar con nosotros para comprobarlo.
